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EL ARTE DE NOMBRAR ESPECIES: TRADICIONES, INGENIO, MÚSICA Y UNO QUE OTRO CHASCARRILLO

ARAC'NOTA # 41

En diferentes fuentes en Internet, así como en nuestro sitio de Arácnidos, cotidianamente encontramos información sobre la gran cantidad de especies nuevas que se describen día con día. De hecho, en varios de los 11 órdenes tradicionalmente clasificados en la clase Arachnida, el porcentaje de especies conocidas representa, en el mejor de los casos, la mitad de lo que en realidad existe en la naturaleza.


Pero en estos casos, ¿qué sucede si descubrimos una especie nueva? Es aquí donde aparece una disciplina de la Biología conocida como Taxonomía, la cual provee los lineamientos y reglas a seguir para poder describir a una especie. Durante este proceso, los investigadores deben tomar una decisión muy importante al describir especies, y esto es, ¡el nombre que deben llevar! Recordemos que el nombre científico de cualquier especie está compuesto por dos palabras en latín que deben escribirse en itálicas (cursivas) y la primer letra de la primera palabra en mayúscula, por ejemplo: el nombre científico del humano es Homo sapiens. Los nombres científicos, regularmente deben ir acompañados del apellido del autor(es) y el año de publicación: Homo sapiens Linnaeus, 1758.


Dentro de los arácnidos, hay muchas especies que han sido nombradas de acuerdo al criterio de la toponímia, esto quiere decir, que el nombre científico hace referencia al lugar donde éstas habitan, por citar algunos pocos ejemplos: 1) el escorpión Vaejovis mexicanus C. L. Koch, 1836, 2) el opilión Stygnopsis oaxacensis Goodnight y Goodnight, 1973 y 3) la araña Paratropis tuxtlensis Valdez-Mondragón et al., 2014. Como pueden inferir por el nombre, en la primer especie indica que el alacrán habita en México, el opilión que se encuentra en Oaxaca y la araña que es de la región de Los Tuxtlas, en Veracruz.


Otra forma tradicional de nombrar, es resaltar alguna característica llamativa del taxón utilizando raíces griegas o latinas, por ejemplo: 1) el género de Opiliones Paramitraceras Pickard-Cambridge, 1905 que significa: “que lleva un cuerno en la cabeza”, debido a una prominencia anterior muy distintiva de estos organismos; 2) el género de alacranes Centruroides Marx, 1889 significa: “cola en forma de espina”, en alusión al metasoma, y 3) el género africano de alacranes Androctonus Ehrenberg, 1828, que literalmente significa: “el que mata hombres”, aquí no hace falta dar más detalles.


Otra forma bastante común de nombrar especies o géneros, es dedicándosela a algún experto de ciertos grupos, como en los siguientes ejemplos particularmente a especialistas en arácnidos: 1) el género de Opiliones Giribetia Clouse, 2012; 2) el género de alacranes Franckeus Soleglad y Fet, 2005, y 3) el opilión Crettaros santibanezi Cruz-López y Francke, 2015. En este caso, los dos primeros nombres de géneros fueron dedicados a Gonzalo Giribet y a Oscar Francke, ambos son investigadores reconocidos a nivel mundial que han dedicado su vida al estudio de Opiliones y Scorpiones, respectivamente. El tercer nombre, fue dedicado al famoso investigador y director de Arácnidos.org Carlos Santibáñez-López, quien participó activamente en la recolecta de especímenes de la especie que ahora lleva su nombre.


Algo muy peculiar en Latinoamérica, en particular en México, es nombrar especies utilizando palabras con raíces de origen Náhuatl, Maya o Zapoteco, por ejemplo: 1) la tarántula de bosque Hemirrhagus benzaa Mendoza, 2014, donde “ben’zaa” proviene del Zapoteco, que significa gente de las nubes; 2) el opilión Philora quetzalzin Cruz-López y Francke, 2013, donde la palabra “quetzalzin” proviene del Náhuatl y significa: pequeña bonita, en alusión al diminuto tamaño de esta especie; 3) el género de alacranes Kuarapu Francke y Ponce-Saavedra, 2010, que proviene de la palabra Purépecha “kuarapu”, que significa alacrán; y 4) el género de Opiliones llamado Mictlana Cruz-López y Francke, 2015, en referencia al Mictlán, el cual era considerado como el inframundo para la cultura Mexica, debido a que estos organismos se encuentran a gran profundidad en las cuevas.


Figura 1. Ejemplos de algunos taxones de arácnidos con nombres de músicos y personajes famosos: A) Heteropoda davidbowie, dedicada a David Bowie. B) Hypognatha zappa, dedicada a Frank Zappa. C) el género Darthvaderum dedicado a Darth Vader. Imagen tomada de Internet.


Así como estos ejemplos, hay una gran cantidad de nombres científicos de géneros y especies que hacen referencia a diversas culturas, religiones, deidades, demonios y dioses, algunas veces los investigadores van más allá nombrando especies utilizando símbolos de la cultura pop, por ejemplo: 1) la araña Heteropoda davidbowie Jäger, 2008, dedicada en honor al músico y compositor británico David Bowie, quien fue conocido por su recorrido musical así como por su originalidad al presentarse en los escenarios (Figura 1A); 2) otra especie de araña, Pachygnatha zappa Bosmans y Bosselaers, 1994, quien de acuerdo a sus autores, esta especie presenta una mancha gris en la parte ventral del opistosoma, la cual se parece al bigote del famoso compositor Frank Zappa (Figura 1B); 3) el género de esquizómidos de Australia Draculoides Harvey, 1992 o la garrapata Deinocroton draculi Peñalver et al. 2017, (ver Arac’nota # 23), nombradas en honor al vampiro más famoso, Drácula de la novela de Bram Stoker; 4) el género de ácaros Darthvaderum Hunt, 1996, donde el autor consideró que las partes bucales de estos ácaros le recordaban la máscara del villano de la saga de Star Wars, Darth Vader (Figura 1C); 5) ya que hablamos de la Guerra de las Galaxias, existe una especie de Opiliones llamada Jabbastygnus huttorum Kury y Villarreal, 2015, donde el nombre es en honor de nada más y nada menos que a Jabba the Hutt, el comerciante malévolo de esta saga. El nombre surgió, porque las partes genitales de esta especie se parecen a la cara grotesca de Jabba; 6) otro caso reciente sobre Star Wars, es el género de arañas Stormtropis Perafán et al., 2019, en honor a estos soldados del imperio, los Stormtroopers; 7) por increíble que parezca, existe un género de Opiliones llamado simplemente Oo Alonso-Zarazaga, 2011, el cual es una contracción de la palabra “ovalia”, que significa, en forma de huevo; y 8) otro género de Opiliones con un nombre curioso es Bichito, no hace falta explicar el por qué.


Estos fueron algunos ejemplos de nombres científicos peculiares de géneros y especies de arácnidos, la lista es interminable, y no cabe duda que los investigadores nos sorprenden con su ingenio a la hora de nombrar especies, siempre y cuando, estos sigan al pie de la letra las normas que dictan los códigos de nomenclatura taxonómica.


©Arácnidos

Editor: Ricardo Paredes-León.

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